Cómo conseguir verdaderos superpoderes
Los otros niños son Anna (Alva Brynsmo Ramstad), la hermana mayor autista no conmutativa de Ida, y Aisha (Mina Yasmin Bremseth Asheim), una joven con vitíligo, una enfermedad que decolora la piel. Ida muestra habilidades telepáticas. El único varón del grupo es Ben (Sam Ashraf), cuya capacidad para mover objetos se extiende a querer que otros se comprometan con su voluntad.Algunas películas como La mala semilla (que, por cierto, Eli Roth me dijo que planea hacer un remake -todavía está esperando-), Eden Lake y Tenemos que hablar de Kevin provocan eficazmente el miedo a los psicópatas en ciernes. Pero el accesorio más frecuente en el género tiende a explotar la inocencia como disfraz para engañar a los adultos crédulos que se dejan llevar por el encanto de una sonrisa y los buenos modales -os estoy mirando a vosotros, El buen hijo y Mikey-.
Los niños de la película de Vogt pueden ser violentos y crueles. Pero en las películas en las que los niños desagradables hacen cosas desagradables, Los inocentes es una raza propia. Sí, los niños cometen actos maliciosos, pero incluso el peor de ellos actúa con un sentido del bien y del mal muy poco desarrollado. De acuerdo, tal vez eso se lea como maldad, pero dentro del contexto de la película, estos extremos maliciosos resuenan más trágicos que terroríficos. Algunos no estarán de acuerdo y, como prueba, se referirán a una escena alarmante que no se revelará aquí -no para evitar spoilers, sino para prevenir cualquier desencadenante innecesario, principalmente el mío-. Vogt ha dicho en entrevistas que la idea de la película se le ocurrió después de tener sus propios hijos. Es una afirmación bastante condenatoria, teniendo en cuenta la oscura visión de la película sobre los juegos de niños y los fallos de lógica que pueden producirse en una mente joven. Pero no creo que Vogt esté muy equivocado en sus suposiciones. Hay una razón por la que nos resistimos a dar a nuestros hijos esa pistola de aire comprimido que nos piden. No es por miedo a que nuestros hijos cometan atrocidades como en la película de Vogt, sino porque la mayoría de los padres reconocen que la irresponsabilidad tiene consecuencias, y que los niños son más propensos a actuar por instinto que por razón. Vogt subestima de forma magistral -sin duda exasperante para algunos- el horror de su película filtrándolo a través de un brillante sol nórdico de verano mientras los adultos pululan ajenos a la violencia que les rodea.
¿Son reales los superpoderes?
Un superpoder es una habilidad sobrehumana actualmente ficticia. Los superpoderes suelen aparecer en los cómics de ciencia ficción, los programas de televisión, los videojuegos y las películas como el atributo clave de un superhéroe. El concepto se originó en los cómics estadounidenses y en las revistas pulp de los años 30 y 40, y poco a poco se ha ido abriendo camino en otros géneros y medios[1].
No existe una definición rígida de «superpoder». En la cultura popular, se suele asociar con habilidades inusuales como el vuelo, la fuerza aumentada, la invulnerabilidad o la velocidad aumentada. Sin embargo, también puede describir habilidades naturales que alcanzan el máximo potencial humano, como la inteligencia mejorada o el dominio de las armas[2][3][4].
En general, los superhéroes como Batman y Iron Man pueden ser clasificados como superhéroes aunque no tengan habilidades sobrehumanas reales más allá de su talento excepcional y su tecnología avanzada. Del mismo modo, los personajes con habilidades sobrehumanas derivadas de fuentes artificiales y externas, como el anillo de poder de Linterna Verde y la armadura de Iron Man de Tony Stark, pueden describirse como superpoderes, pero su portador no es necesariamente un superhombre.
Geri bildirim
«La discapacidad no es un déficit de la persona, sino que pone de manifiesto los déficits de nuestra cultura y sociedad, que no acepta, fomenta y celebra plenamente la humanidad, sea cual sea su aspecto». Las capacidades únicas y distintivas de este increíble grupo de niños pueden servir de inspiración para todos nosotros, para animarnos unos a otros».
Rachel Callander es presentadora, formadora, artista galardonada y autora del libro destacado del premio IPPY Nueva York 2015, Super Power Baby Project. El inspirador libro fotográfico celebra las vidas y las habilidades únicas de 75 niños de Nueva Zelanda con una condición cromosómica o genérica. El libro se inspiró en la experiencia personal de Rachel con su difunta hija, Evie Amore, que nació con una rara condición cromosómica.
Utilizando sus habilidades y su pasión por ayudar a los demás, Rachel emprendió un viaje por toda Nueva Zelanda para conocer a las familias y fotografiar a otros niños con condiciones cromosómicas y genéticas para capturar los preciosos momentos y la belleza de los niños.
10 superpoderes que puedes tener ahora
La sangre hizo que los niños desarrollaran habilidades sobrenaturales para poder servir como generales en el ejército de Lucifer contra la humanidad y Dios. Estas habilidades podían ser reforzadas por el consumo de sangre de demonio.
Alrededor de la segunda temporada, Azazel quiso poner a prueba a estos niños para saber quién sería el más fuerte, así que los puso en un pueblo abandonado llamado Cold Oak y les dijo que sólo uno podría sobrevivir. Esto acabó desencadenando una competición entre los Niños. Azazel hizo creer a todos que quería un líder para su ejército de demonios.
Sin embargo, como se reveló más tarde, el objetivo era mayor que el de liderar un ejército de demonios. Azazel eligió a los niños porque todos eran recipientes potenciales para Lucifer. El más fuerte sería elegido para contener a Lucifer durante el Apocalipsis. Sam Winchester fue el único superviviente y por ello, a pesar de sus mayores esfuerzos, fue tomado por Lucifer tanto por ser un Niño Especial como por su destino predeterminado como verdadero recipiente de Lucifer.