Picor en lunar

Molécula asimétrica

Los lunares son el conjunto de melanocitos, un tipo de células que producen melanina o los pigmentos. Suelen desarrollarse en los primeros años de vida de las personas, y cambian lentamente a lo largo de los años. Los cambios incluyen el tamaño, el color o el crecimiento del vello. Aunque los cambios pueden producirse, siempre son lentos y a lo largo de muchos años. En general, cualquier cambio brusco en un lunar no es normal.

Se cree que el picor puede estar relacionado con la irritación de la piel por algún producto, como un nuevo jabón, loción, detergente o ropa. A menudo no se puede identificar la causa. Aunque es poco frecuente, un «lunar» que pica puede ser un cáncer de piel.

Uno de nuestros pacientes se dio cuenta de esta lesión parecida a un lunar en la espalda debido a los picores. Tras un examen minucioso por parte de nuestros médicos especializados en cáncer de piel, descubrimos que en realidad se trata de un carcinoma de células basales (CCB).    El CBC es el cáncer de piel más común en Australia. Según una encuesta realizada por el Consejo del Cáncer, en 2012 se trataron más de 200.000 CCB con escisión quirúrgica.

Topo seco

Lo primero es lo primero: ¿por qué nos pica? Aunque los científicos e investigadores todavía no pueden explicar claramente la razón evolutiva del picor (también conocido como prurito), sabemos que el picor suele ser una señal de que algo ha agravado o dañado una zona de nuestra piel. El picor puede ser útil para advertirnos de la presencia de sustancias o agentes nocivos en nuestra piel, como mosquitos o plantas venenosas. A nivel anatómico, el picor es el resultado de la estimulación de las terminaciones nerviosas (también conocidas como pruriceptores). Esta estimulación suele estar causada por una inflamación, sequedad o lesión de la piel, las mucosas o la conjuntiva del ojo. El picor también puede estar causado por enfermedades corporales como el melanoma o la enfermedad hepática.¿Qué aspecto tiene un lunar normal?

¿Pican los lunares cancerosos?

Los lunares son crecimientos comunes que aparecen en casi todo el cuerpo. Estos crecimientos se desarrollan cuando las células melanocíticas de la epidermis se forman en racimos en lugar de extenderse. En la mayoría de los casos, las células melanocíticas son normales, lo que da lugar al crecimiento de un lunar benigno. Lo preocupante de los lunares es que, por lo general, debido a la exposición al sol, las células melanocíticas pueden volverse anormales, dando lugar a un lunar canceroso o melanoma.

Debido a la relación entre los lunares y el melanoma, más personas se sienten preocupadas por los lunares que tienen actualmente. Incluso con parámetros específicos que indican el crecimiento anormal de las células melanocitarias, uno puede sentirse muy inseguro sobre cómo determinar si un lunar debe ser revisado por un dermatólogo.

Es importante familiarizarse con los signos del cáncer de piel, pero aún más con los lunares de su propio cuerpo. Todos somos diferentes, lo que significa que nuestros lunares no se parecerán a los de los demás. A medida que envejecemos, es posible que los lunares desaparezcan o aumenten de tamaño. Podemos desarrollar nuevos lunares con la edad, aunque los nuevos lunares son el resultado del daño solar en algún momento. Incluso la exposición persistente durante la adolescencia puede aparecer en la piel años después en forma de nuevos lunares.

Qué ocurre si se corta un lunar

Los lunares que sangran o pican pueden aparecer cuando se han irritado o rascado: los lunares que se enganchan en la ropa, los que se cortan con una cuchilla de afeitar, los que se maquillan, los que se rascan por una picadura de insecto y los que se depilan son factores muy comunes.

¿Qué debo hacer si tengo un lunar que sangra o pica? Los lunares que sangran o pican pueden aparecer cuando se han irritado o rascado: los lunares que se enganchan en la ropa, el corte con una cuchilla de afeitar, la aplicación de maquillaje, el rascado de una picadura de insecto y la depilación son factores desencadenantes muy comunes. Sin embargo, estos también son signos de que el lunar es canceroso.

Hay señales definitivas de que un lunar puede ser un melanoma y las personas deben acudir inmediatamente a un dermatólogo. Si tiene un lunar nuevo o un cambio en sus lunares -sangrado, cambios de forma, tamaño o color, picor o dolor en los lunares- es imprescindible que acuda al médico lo antes posible.

Los pacientes deben estar atentos para que se les revisen los lunares anualmente o según les aconseje su dermatólogo si tienen antecedentes de nevus (lunares) anormales anteriormente o de cáncer de piel. Un diagnóstico precoz es crucial para controlar esta enfermedad potencialmente mortal; el cáncer de piel que se detecta y elimina a tiempo es casi siempre curable.

About Author: